Le dolió… A la auditora general Delia González Cobos que se confirmara la confabulación de sus empleados con despachos y Ayuntamientos para maquillar sus cuentas públicas; tanto fue el dolor, que se subió al tren del supuesto conflicto de intereses de integrantes de la Comisión de Vigilancia, iniciado por la diputada Citlali Medellín, quien solita reveló que, está teniendo problemas para que le certifiquen documentación de su último año como alcaldesa de Tamiahua.
El lunes, declaró ante un medio estatal, que varios de los legisladores que integran la comisión que la vigila, entre ellos el diputado Luis Fernando Cervantes Cruz, exalcalde de Pueblo Viejo, debían excusarse del dictamen de la Cuenta Pública 2021 al estar directamente relacionados con el ejercicio técnico que realizó el órgano de control y que tendrá que ser aprobado por diputados locales en el próximo mes de octubre.
Y como el pecho de muchos, no es bodega para guardarle respuesta; a la maestra Delia le recordaron el papel que juega en esta revisión, le recordaron que está ahí ostentando un salario nada despreciable, para encabezar las revisiones de las cuentas de exalcaldes y entregar a los veracruzanos un trabajo impecable y transparente.
Este es el primer año que González Cobos trabaja con varios de los integrantes de la Comisión de Vigilancia y podría decirse que esta vez le tocó bailar con la más fea, se topó con pared, ya que no están dispuestos a pasar por alto el cochinero detectado al interior del organismo.
Y la están apretando… Ya que no es de gratis que cada semana, luego de que Luis Arturo Santiago Martínez “renunciara” a la presidencia de dicha comisión, están sosteniendo reuniones de trabajo en las instalaciones del ORFIS para revisar con lupa cada avance de la auditora y su equipo.
La auditora general pensó que con pedir a los legisladores que la apoyaran a difundir el número telefónico 800 00 ORFIS iba a empezar a limpiar sus culpas de este proceso de revisión que ella ayudó a ensuciar desde el inicio, creyó, que con el cambio de integrantes se daría el “borrón y cuenta nueva”. ¡Pues no!
Veremos dijo el ciego… Esta misma semana, Delia González deberá entregar a la Comisión permanente de Vigilancia que preside Rafael Fararoni Magaña la Cuenta Pública 2021, de la cual se excusarán Luis Fernando Cervantes, Othon Hernández Candanedo, Nora Lagunes Jauregui y Perla Romero, quienes conocedores de la ley darán ejemplo de legalidad durante el proceso.
¡Y que conste, tanto peca el que mata la vaca, como el que le agarra la pata!